Toxina botulínica o botox

Toxina botulínica o botox

Seguro que has escuchado hablar de ello. Pero, ¿realmente sabes lo que es la toxina botulínica o botox? Es una sustancia química que actúa sobre los músculos provocando su parálisis. Entre sus numerosas aplicaciones médicas destacan: 

  • Las aplicaciones estéticas.
  • El bruxismo, trastorno en el que el paciente aprieta los dientes.
  • La hiperhidrosis o exceso de sudoración.

Para comprender como actúa el botox en relación a las arrugas faciales hay que tener en cuenta sus tipos: 

  • Estáticas, producidas por la pérdida natural de colágeno en los tejidos a lo largo del tiempo.
  • Dinámicas, consecuencia del movimiento repetitivo. Estas arrugas se vuelven menos visibles si hay una expresión facial relajada.

Gracias a este tratamiento se logra frenar la creación y empeoramiento de las arrugas dinámicas, comúnmente conocidas como “líneas de expresión” y especialmente presentes en el entrecejo, la frente, las comisuras de los labios o el contorno de los ojos. 

 Con una correcta aplicación de la toxina el paciente puede seguir expresándose con naturalidad pero de forma menos intensa, olvidándose entre otras de las temidas “patas de gallo”.

Cada día es una técnica más demandada ya que evita la cirugía, es prácticamente indolora y raramente produce efectos adversos.

El tratamiento se realiza en la clínica mediante unas pocas inyecciones muy finas en tan solo unos 15 o 20 minutos. Los efectos empiezan a ser visibles a partir de los 2-3 días posteriores a su aplicación y pasadas 2 semanas se recomienda revisar y valorar la evolución de la terapia para hacer un pequeño repaso. 

La duración depende en gran medida de la musculatura de cada paciente pero por lo general tiene un efecto temporal de unos 4-6 meses.

Ya conoces más sobre la toxina botulínica o botox. Ahora solo queda consultar a los especialistas de CRU y animarte a dar el paso.

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